martes, 12 de junio de 2012

Los asesinos seriales de las Parejas

Trabajar con parejas es todo un Arte y es uno de los mayores retos a los que nos enfrentamos quienes los atendemos en el ámbito  clínico, y su dificultad comienza desde el hecho en que quien viene a consulta muchas veces no tiene claro ni siquiera el concepto propio que tiene internalizado de lo que significa ser y estar en pareja, hay muchos libros y autores que manejan cuales pueden ser los predicadores de los conflictos de pareja, por lo que decidí investigar a muchos de ellos y poder ofrecerles un reflector un poco mas amplio para auto-observarse y ver si tenemos en casa a alguno de estos asesinos sumamente crueles.



  1. Falsas Creencias: pensamientos y expectativas irreales y fantásticas " Es que yo pensé que tu ibas a...", " yo creía que tú...", "yo esperaba que tú..."  tenemos una gran facilidad para crearnos historias en nuestra cabeza de como debe ser, reaccionar y sentir el otro, hacemos castillos en el aire formando expectativas completa mente irreales y cuando no se cumplen generamos frustración y mucho resentimiento hacia el otro, cuando en realidad, las expectativas son mías, no son de el otro y esté no debe de cumplirlas porque es una forma sumamente infantil de relacionarnos.
  2. Vivir idealizando al otro: al principio de la relación de pareja no la estamos viendo en su totalidad, estamos en un estado psicotico en donde necesito ponerle adornos de mas para poder acercarme a ella, me estoy mirando realmente a mi a través de sus ojos. Hay parejas que viven en esta etapa eternamente y no logran poder ver a su pareja tal cual es, esto causa que no podamos aceptar incondicionalmente al otro.
  3. Intentar que el otro cambie: uno de los principales motivos por lo que las parejas llegan a consulta, desean que el otro cambie por ellos, cuando en realidad el otro no puede y no debe cambiar por nadie sino por si mismo, solo las actitudes, y la forma de relacionarse con el otro puede cambiar, la esencia de las personas no cambia. 
  4. No aceptar al otro incondicionalmente: con su forma de ser ( no la que tu quisieras que tuviera, sino la que ES), con su forma de amar ( no con la que te gustaría que te amara) con TODA su historia ( equivocaciones, errores, decisiones,  relaciones pasadas, hijos) y con su familia ( el es 100% su familia, rechazarla es rechazarlo a el/ella)
  5. No elegirlo CONSCIENTEMENTE: la pareja es realmente una pareja cuando logra aceptar al otro sabiendo que el no es como uno imaginaba o deseaba, cuando ya no me gusta tanto lo que veo pero que a sabiendas de eso decido seguir caminando a su lado, allí empieza el verdadero compromiso, no antes ( no importa los años que lleves con tu pareja, ni si están casados o no)
  6. Criticas: hacia la persona no a los actos incluyendo acusaciones y manejo de culpa.
  7. Desprecio: se expresa por medio de los sarcasmos, insultos, burlas y escepticismo de las capacidades del otro.
  8. Actitud defensiva: mediante el cual se hace recaer en el otro todo el peso de la responsabilidad  convirtiéndola en culpa.
  9. Actitud evasiva: el silencio hace sentir al otro que no tiene importancia lo que dice, hace y siente.
  10. Exigir que el otro cubra nuestras propias demandas infantiles: tener una imperiosa y egoista necesidad de que el otro solucione lo que uno no esta dispuesto a remediar, las carencias infantiles son nuestras y como adultos somos los únicos capacitados y responsables de buscar llenarlas y resolverlas, algunas de estas carencias son: necesidad de aceptación, de ayuda, de autoafirmación, de ser vistos, de ser aprobados, amados, reconocidos, integrados,atendidos, pertenecer, seguridad, de ser incluidos, de ser respetados, de ser cuidados.
  11. No estar en el lugar que nos corresponde: ser papas de nuestros papas, ser parejas de nuestros papas, no nos ayuda a poder mirar a nuestra pareja desde una visión adulta, lo hacemos desde una mirada infantil.
  12. No haber saldado cuentas anteriores: tener una lista de reclamos, juicios, reproches hacia nuestros padres hace que nuestra mirada este hacia el retrovisor, necesitamos liberarnos para poder enfocarnos con fuerza hacia enfrente, hacia la vida actual " ¡Si estoy en paz con mi sistema, mi mirada estará libre y dispuesta para lo nuevo y nuestra familia cumplirá la función de apoyo!. Así, desaparece el miedo al abandono. ¡La fuerza de la vida viene de atrás y se enfoca hacia adelante"
  13. No amarnos ni aceptarnos incondicionalmente: nuestra pareja no es responsable de hacernos sentir queridos, debemos empezar por ser nosotros los primeros en sentirnos así, tampoco es responsable de aliviar mi sentimiento de soledad, ni es el que debe llenar o suplir nuestra necesidades o carencias, podemos compartir nuestra felicidad que ya debe existir en nosotros. Aceptarnos Incondicionalmente implica poder estar en paz y reconciliarnos con nuestra propia sombra y asumir nuestros errores con responsabilidad asumiendo nuestras propias consecuencias no buscando a quien hacer responsable.
  14. Duelos Inconclusos: soltar con amor, reconocer y dar un buen lugar a nuestras parejas anteriores, ayuda a poder tomar a nuestra actual pareja y poder mirarla sin distractores pasados.
  15. Equilibrio entre dar, recibir y tomar. Es decir, se trata de una relación de igual a igual, donde no buscamos que la pareja haga de padre o madre protectora y por tanto, ambos tenemos igualdad de responsabilidades. Ambos somos conscientes de necesitarnos mutuamente y damos y recibimos de forma equilibrada. Cuanto mayor es el intercambio, más profunda es la relación y el vínculo se hace más fuerte. Aporta alegría, plenitud y prosperidad a la pareja. Dar en exceso o tomar en exceso, genera descontento,sensación de vacío, mucho resentimiento y una gran deuda, que entre mas grande sea será mas difícil de cobrar y de pagar. Por tanto, en la pareja (y en las relaciones en general), no hay que dar más de lo que el otro pueda devolver. Recordando que quien poco da y poco toma permanecerá libre de relaciones profundas y también de prosperidad.
  16. Distraer tu mirada: Para poder estar en pareja debemos mirarla sin distractores, si volteamos hacia un trabajo, un hijo, unos padres, a otra persona, o a alguna otra adicción, dejamos de ser pareja.


Todos los conflictos de pareja se pueden solucionar, siempre y cuando AMBOS así lo quieran, puedan y aun no sea demasiado tarde para hacerlo de tan lacerada que esta la relación












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